En 1911, el arqueólogo estadounidense Hiram Bingham, orientado por pobladores locales, llega a la ciudadela de Machu Picchu, dándola a conocer al mundo. En 1924, con la visita del embajador de Estados Unidos Miles Pointdexter a Cuzco, Martín Chambi acompaña la expedición de Pointdexter a Machu Picchu realizando fotografías de la ciudadela que aun estaba cubierta de vegetación. Cuatro años más tarde, Martín Chambi viaja, junto a la expedición científica organizada por el prefecto de Cuzco Víctor M. Vélez, a Machu Picchu realizando fotografías de la ciudadela que después se publicarían en la revista Mundial dirigida por Andrés Avelino Aramburú. Más adelante, Machu Picchu capturó la atención internacional y se convirtió en un destino de viaje importante para turistas y cuzqueños.